Victoria... de las Abuelas
Una de las últimas nietas recuperadas por las Abuelas, Violeta Montenegro, en su visita a Lanús. El Museo Histórico Piñeiro abrió sus puertas para recibirla y agazajarla. Utophia estuvo presente
Abrazados por Victoria y por su relato, un verdadero canto a la esperanza y a la lucha. Durante la charla junto a Omar Dalponte y Anibal Rushan, directivos del Museo Histórico Piñeiro
Tuvimos el inmenso honor de estar junto a una bellísima mujer, que dejó a los presentes con un nudo en la garganta luego de contar los episodios de su vida en manos de sus apropiadores. Pero también nos brindó un verdadero mensaje de esperanza.
"Mi nombre es victoria Montenegro y soy una de las 105 nietos restituidos por las abuelas de plaza de mayo. Mis papás están desaparecidos. Mi papá se llamaba Roque Montenegro, mi mamá Nilda Torres. Eran de la provincia de Salta y militaban desde muy chiquitos. Tengo además, dos tíos desaparecidos. Con motivo del operativo independencia, tuvieron que venir a Buenos Aires. Y acá nazco yo, el 31 de enero del 76. Poco después, el 13 de Febrero, se hace un operativo en nuestra casa y pasamos los tres a ser desaparecidos." Así comenzó el relato de Victoria, ante un público que mantuvo un silencio absoluto durante más de una hora.
La voz dulce y suave de Victoria, era un contraste continuo con la gravedad de los hechos que contaba y por momentos se nos aparecía nuevamente como una criatura que continuaba prisionera en una cárcel invisible, hábilmente diseñada por sus apropiadores. Victoria y María Sol, parecían confundirse, por un instante, hasta que Victoria renacía con su mensaje, "Se quería cerrar la historia: Basta, olvido, perdón. Ahora estamos hablando de cárcel común para los genocidas y de complicidad cívico-militar. No solamente los militares, sino las empresas que fueron cómplices. En este momento histórico que la política de los derechos humanos es el compromiso por lo que falta, por el resto de los compañeros y por los que nos pasó a nosotros no pase nunca más a nadie en ningún lugar del mundo."
Ninguno de los presentes se retiró sin antes confundirse en un abrazo y solidarizarse con su lucha y compromiso.
Azúcar amarga, los BlaquierUna de las últimas nietas recuperadas por las Abuelas, Violeta Montenegro, en su visita a Lanús. El Museo Histórico Piñeiro abrió sus puertas para recibirla y agazajarla. Utophia estuvo presente
Abrazados por Victoria y por su relato, un verdadero canto a la esperanza y a la lucha. Durante la charla junto a Omar Dalponte y Anibal Rushan, directivos del Museo Histórico Piñeiro
Tuvimos el inmenso honor de estar junto a una bellísima mujer, que dejó a los presentes con un nudo en la garganta luego de contar los episodios de su vida en manos de sus apropiadores. Pero también nos brindó un verdadero mensaje de esperanza.
"Mi nombre es victoria Montenegro y soy una de las 105 nietos restituidos por las abuelas de plaza de mayo. Mis papás están desaparecidos. Mi papá se llamaba Roque Montenegro, mi mamá Nilda Torres. Eran de la provincia de Salta y militaban desde muy chiquitos. Tengo además, dos tíos desaparecidos. Con motivo del operativo independencia, tuvieron que venir a Buenos Aires. Y acá nazco yo, el 31 de enero del 76. Poco después, el 13 de Febrero, se hace un operativo en nuestra casa y pasamos los tres a ser desaparecidos." Así comenzó el relato de Victoria, ante un público que mantuvo un silencio absoluto durante más de una hora.
La voz dulce y suave de Victoria, era un contraste continuo con la gravedad de los hechos que contaba y por momentos se nos aparecía nuevamente como una criatura que continuaba prisionera en una cárcel invisible, hábilmente diseñada por sus apropiadores. Victoria y María Sol, parecían confundirse, por un instante, hasta que Victoria renacía con su mensaje, "Se quería cerrar la historia: Basta, olvido, perdón. Ahora estamos hablando de cárcel común para los genocidas y de complicidad cívico-militar. No solamente los militares, sino las empresas que fueron cómplices. En este momento histórico que la política de los derechos humanos es el compromiso por lo que falta, por el resto de los compañeros y por los que nos pasó a nosotros no pase nunca más a nadie en ningún lugar del mundo."
Ninguno de los presentes se retiró sin antes confundirse en un abrazo y solidarizarse con su lucha y compromiso.
Le
prohibieron salir del país al dueño de Ledesma, investigado por secuestros
durante la dictadura
Carlos Pedro Blaquier y su esposa Nelly Arrieta, dos exponentes de la High Society, colaboradores de los genocidas
El
empresario Carlos Pedro Blaquier y el ex administrador del ingenio Alberto
Lemos deberán presentarse a declarar el 17 y 18 de mayo. Audio: entrevista de
Nihuil al abogado querellante.
El Dr. Pablo
Pelazzo, abogado de madres y familiares de detenidos desaparecidos de Jujuy,
entrevistado por el periodista Diego Tinnirello, de Radio Nihuil.
La Justicia
le impidió la salida del país al empresario Carlos Pedro Blaquier, dueño del
Ingenio Ledesma y también acusado por delitos de lesa humanidad cometidos en la
denominada "Noche del Apagón", en Jujuy.
Fue Pablo
Pelazzo, abogado querellante en la causa por la desaparición de trabajadores
del ingenio Ledesma durante la última dictadura, fue quien confirmó en CN23 que
la justicia ordenó que se le prohíba salir del país tanto al presidente de la
compañía, Carlos Pedro Blaquier, como a Alberto Lemos, ex administrador de la
misma. Leer más
15/11/2011.
Ayer, el doctor Carlos Pedro Blaquier asumió como presidente honorario de la
Sociedad Científica Argentina.
Al cierre de
la presente nota, y en una nueva demostración de pertenencia ideológica, el
jefe de la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires, Ingeniero Mauricio Macri, nombra
como Embajadora Cultural de la ciudad a la Sra. Nelly Arrieta de Blaquier,
esposa del dueño del Ingenio Ledesma y vicepresidenta de la empresa en 1976. La
fábrica, que produce azúcar y papel, se encuentra en la provincia de Jujuy, más
precisamente en el pueblo Libertador General San Martín, tristemente célebre,
ya que entre el 20 al 27 de julio de 1976 se produjo “La noche del apagón”
Cuando los
genocidas arrasaban con vidas y bienes
"El
ataque a la casa duró varias horas y no dejó nada en pie"
El testigo
Martín Cañas recordó a su familia en el juicio por el Circuito Camps (Foto:
Esteban Martirena)
En otra
audiencia de juicio por el Circuito Camps, un testigo recordó el operativo y
los secuestros que diezmaron su familia: tiene una hermana y un hermano
secuestrados y a su madre y una hermana asesinadas. Inspeccionan Arana y la
Quinta.
Martín
Horacio Cañas era el menor de cinco hermanos. De todos ellos la dictadura sólo
le dejó uno. Los otros ya no están: Amelia, de 29 años, y Santiago, de 26,
fueron secuestrados en 1977 y permanecen desaparecidos; su madre, María
Angélica Blancá, y su hermana Carmen, de 24 años, fueron asesinadas en un
ataque a la casa del barrio San Carlos, en La Plata, que habían alquilado
intentando esconderse de la represión. Leer más
Tribunal
argentino rechaza encarcelar acusados por Masacre de Trelew
El Tribunal Federal
de la patagónica ciudad de Comodoro Rivadavia rechazó hoy un pedido de encerrar
de inmediato en una cárcel común a cuatro de los exmarinos argentinos
procesados por la Masacre de Trelew, en 1972.
La solicitud
fue formulada por la Fiscalía y las querellas en la primera sesión del
histórico juicio, en el cual comparecen los excapitanes Luis Sosa, Emilio Del
Real, Rubén Paccagnini y Jorge Bautista, éste último por encubrimiento, y el
cabo Carlos Morandino, acusados por el fusilamiento de 19 presos políticos.
El reclamo,
dijo la agencia de noticias Télam, invocó jurisprudencia acumulada en numerosos
juicios por delitos de lesa humanidad y solo exceptuaba por el momento a
Bautista.
Sin embargo,
el juez Enrique Guanziroli manifestó que el pedido “no acompañó elementos
nuevos de convicción para variar el criterio” y dictar el inmediato encierro de
los acusados, lo cual provocó manifestaciones de descontento por parte de la
numerosa concurrencia al inicio del juicio oral y público. Leer más
En búsqueda
de atenuantes
Desde el año 1981 al 87 trabajé en la planta Avellaneda de Molinos Río de La Plata como personal de seguridad y bombero. Allí tuve de compañero de trabajo al hermano de "Sacha" Matilde Artes Company, abuela de Carla Rutila Artes. En varias oportunidades charlamos sobre la forma en que los padres de Carla habían sido desaparecidos y como se produjo su apropiación por parte de este lumpen de los servicios, que junto a Gordon y su banda, Guglialminetti y los integrantes de la Triple A, trabajaban en conjunto con los Grupos de Tareas de Seguridad Federal.
En estas charlas tambien se mezclaban las desapariciones de los 30 operarios de la planta, ocurridas durante 1976 y que citados a la Oficina del Jefe de Seguridad, eran detenidos por personal de las fuerzas conjuntas, maniatados y encapuchados y llevados a vehículos que estaban estacionados fuera del establecimiento. Nunca se supo más de ellos. La empresa, tengo entendido, siempre negó que el secuestro se haya efectuado dentro de la fábrica. Sin embargo numerosos compañeros, operarios de la fábrica, cuando se enteraron que me había presentado como testigo en el Juicio contra las Juntas Militares, se comunicaron conmigo informándome de lo ocurrido. Incluso lo hizo uno de los operarios que había sido apresado por error junto a quienes fueron desaparecidos, pues en la lista figuraba un homónimo, y que luego fue liberado. Armando Luchina
Desde el año 1981 al 87 trabajé en la planta Avellaneda de Molinos Río de La Plata como personal de seguridad y bombero. Allí tuve de compañero de trabajo al hermano de "Sacha" Matilde Artes Company, abuela de Carla Rutila Artes. En varias oportunidades charlamos sobre la forma en que los padres de Carla habían sido desaparecidos y como se produjo su apropiación por parte de este lumpen de los servicios, que junto a Gordon y su banda, Guglialminetti y los integrantes de la Triple A, trabajaban en conjunto con los Grupos de Tareas de Seguridad Federal.
En estas charlas tambien se mezclaban las desapariciones de los 30 operarios de la planta, ocurridas durante 1976 y que citados a la Oficina del Jefe de Seguridad, eran detenidos por personal de las fuerzas conjuntas, maniatados y encapuchados y llevados a vehículos que estaban estacionados fuera del establecimiento. Nunca se supo más de ellos. La empresa, tengo entendido, siempre negó que el secuestro se haya efectuado dentro de la fábrica. Sin embargo numerosos compañeros, operarios de la fábrica, cuando se enteraron que me había presentado como testigo en el Juicio contra las Juntas Militares, se comunicaron conmigo informándome de lo ocurrido. Incluso lo hizo uno de los operarios que había sido apresado por error junto a quienes fueron desaparecidos, pues en la lista figuraba un homónimo, y que luego fue liberado. Armando Luchina
Eduardo
Ruffo fue el apropiador de Carla Artés, quien lo denunció, además, por abusos.
Los abogados
de Eduardo Ruffo, acusado en este juicio por ocultar la identidad del hijo de
Sara Méndez, y de Susana Colombo, apropiadora de Francisco Madariaga,
intentaron exculparlos y destacaron que colaboraron para que encontraran su
identidad.
Empezó la
etapa de alegatos de la defensa en el juicio por el plan sistemático de robo de
bebés. Los abogados defensores de Eduardo Ruffo y de Susana Colombo pidieron
absoluciones para los acusados. El ex agente de inteligencia Eduardo “Zapato”
Ruffo está acusado por la sustracción, ocultamiento y sustitución de la
identidad de Simón Méndez, el hijo de la uruguaya Sara Méndez. Susana Colombo,
la ex mujer del represor de Campo de Mayo y ex carapintada Víctor Gallo, está
acusada por la apropiación de Francisco Madariaga. Los casos tienen puntos en
común. Los dos son “autores directos”, imputados que llegaron a juicio acusados
por un hecho puntual y no por todos los expedientes. Y algo del rol que
tuvieron en el momento en el que aquellos niños, muchos años después,
conocieron sus identidades emparenta las dos situaciones. Ese fue uno de los
aspectos sobre los que recayó la estrategia de la defensa y también un aspecto
que la fiscalía ya había ponderado y por el que atenuó el pedido de condena. Leer más
El crimen de
Caín
Por Horacio Verbitsky Varios medios han sostenido que relativicé la
cifra de 30.000 desaparecidos y que admití por primera vez que podrían ser
menos. Esas afirmaciones contienen una doble falsedad y exhiben una apabullante
capacidad para trivializar temas trágicos. El origen es una entrevista que
concedí el mes pasado al diario L’Arena, de Verona, Italia. El periodista me
preguntó por la confesión del ex dictador Jorge Videla de que los
detenidos-desaparecidos habían sido asesinados por decisión de la cúpula que él
encabezó. Respondí que me parecía extraordinariamente positiva para la
democracia en la Argentina, luego de tantas décadas de mentiras y silencio. Leer más
No hay comentarios:
Publicar un comentario